El constante crecimiento de la oferta hotelera hace que los hoteleros busquen nuevas estrategias para captar la atención de clientes potenciales y quieran elegir su negocio en un mercado extremadamente competitivo. La globalización convierte a la diferenciación empresarial en un gran desafío, pues cada vez es más común “copiar y pegar” productos hoteleros y sus servicios asociados exitosos.
Los huéspedes son, sin duda, los clientes más importantes de un hotel como negocio, porque son los que lo eligen, lo valoran y lo promueven, tres conductas claves de las cuales un hotel depende para posicionarse en el mercado, entonces los hoteles deben de preocuparse y ocuparse de asistirlos de tal manera que perciban sus estadías como experiencias llenas de fantasías hechas realidades.
En la vida diaria, las personas a menudo descubren que sus pensamientos siguen ciertas fantasías sobre lo que les gustaría ser, sentir, hacer o lograr en sus vidas, es decir sus mentes viajan a un mundo ideal lleno de placer y bienestar.
Me pregunto entonces ¿qué podrían hacer los hoteles para hacer que sus huéspedes sientan que están en sus mundos ideales? Comparto con ustedes algunas transformaciones que se pueden lograr, tales como:
- Convertir al hotel en un lugar donde no hay espacio para la inseguridad física y emocional, la incertidumbre, la desconfianza y las preocupaciones.
- Hacer sentir al huésped que puede ser el gestor de su tiempo de ocio, sin prisas ni condicionamientos.
- Hacer que el huésped experimente constantemente sorpresas y alegrías.
- Hacer que el huésped se sienta importante, independientemente de raza, nacionalidad, orientación sexual o situación económica.
- Convertir el hotel en un lugar que esté lleno de sonrisas y caras amigables, todos dispuestos a atenderlo.
- Hacer al huésped sentir que está viviendo una vida plena y exitosa.
Investigadores y teóricos han descubierto que todas las fantasías tienen elementos positivos, porque proporcionan ¨regresiones breves y redentoras y el cumplimiento de deseos que, a su vez, tienen un efecto curativo. Así, actúan como estímulos que refuerzan las conductas de elección y promoción del lugar donde se vuelven realidades estas fantasías.
Quizás algunos lectores crean que este artículo muestra una fantasía del escritor, sin embargo, citando a Sigmund Freud
¨Las fantasías incluyen gran parte de la verdadera esencia de la personalidad constitutiva de el tema», y que un hombre lleno de energía «es el que tiene éxito por sus propios esfuerzos para convertir sus fantasías en realidades, es por ello que seguiré intentando que las empresas hoteleras comprendan la necesidad de convertir a la Hotelería un ¨mundo de fantasías hechas realidad¨, no sólo para nuestros huéspedes, sino también para nuestros empleados, pues sueños compartidos tienen más posibilidades de hacerse realidad.
Por Osvaldo Torres especial para Online Plus