Luperón, Puerto Plata.- Con el objetivo de restaurar uno de los refugios náuticos naturales más seguros del Caribe y potenciar su atractivo turístico, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales realizó un amplio operativo en la bahía de Luperón, centrado en la extracción de embarcaciones abandonadas y deterioradas que durante años afectaron la navegación segura y el ecosistema marino de esta emblemática zona.
El operativo, liderado por el encargado provincial Juan Guzmán, consistió en la remoción de veleros y barcos de medio calado en estado de abandono que se encontraban hundidos o en avanzado deterioro. Según explicó Guzmán, esta acción permitirá liberar espacio vital para que otras embarcaciones puedan utilizar la bahía como refugio ante fenómenos climáticos, cumpliendo además con los protocolos legales establecidos para naves abandonadas en el país.
Este esfuerzo se enmarca en las disposiciones de la Ley Núm. 5-23, que regula las actividades marítimas en territorio nacional, promoviendo la seguridad y el desarrollo del comercio, el turismo y la protección ambiental.
Además del impacto en la seguridad náutica, la limpieza de la bahía tiene un claro enfoque turístico. “La extracción de estos barcos mejora el paisajismo en una bahía de alta visitación turística, donde familias y navegantes internacionales permanecen durante meses en sus veleros”, destacó Guzmán, al resaltar el potencial de Luperón como puerto de escala en el litoral atlántico.
Según informes técnicos del Ministerio, la bahía ha enfrentado en años recientes alta presión ambiental, incluyendo la contaminación del agua por residuos fecales, vertido de lubricantes de barcos pesqueros y actividades clandestinas. El 65 % de la población local carece de sistema cloacal, y el 70 % de las embarcaciones pesqueras no cumple con normas ambientales, afectando directamente la biodiversidad marina.
Esta intervención continúa el proceso iniciado en noviembre de 2024, cuando el ministro Paíno Henríquez otorgó un plazo de desalojo a ocupantes irregulares del Refugio de Vida Silvestre Bahía de Luperón, tras constatar daños al humedal en el sector Mangles Abajo.
Henríquez reiteró el compromiso del Ministerio con la recuperación integral de la bahía, afirmando que “esta acción es crucial para preservar la biodiversidad y asegurar un desarrollo turístico sostenible que beneficie directamente a la economía local”.
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